Autor: Patxi Calvo. Lector
No todos lo días tiene uno el placer de conocer a personas que tienen entre sus intereses la literatura.
De manera indirecta, conocía la existencia de este club, ya que una muy buena amiga -que aún me quedan- me había hablado de estas personas, pero hoy, por esas casualidades de la vida las he conocido, digo las, aunque entre ellas había un hombre, y, ¡mira tío!, mayoría manda -gramaticalmente hablando-.
Como decía me he visto gratamente sorprendido, porque, cuando ya se despedían unas de otras y de otro comentaban entre si, que "tenían que reunirse para leer literatura sobre Hypatia de Alejandría".
Este tipo de clubes (¿?) es como los billetes de 500 euros, se sabe que existen, pero casi nadie ha visto ninguno, y lo mismo me pasa a mi: por fin he conocido interesantes personas normales (y recalco lo de normales), que no se juntan en torno a una secta, partido, sindicato o agrupación de jefes.
Se reúnen por algo tan intangible y magistral como es la literatura.
Chicas, chico, ha sido un enorme placer haberos conocido, y más placentero -al menos para mi-, será que sigamos manteniendo contacto.
Un fuerte abrazo.
De manera indirecta, conocía la existencia de este club, ya que una muy buena amiga -que aún me quedan- me había hablado de estas personas, pero hoy, por esas casualidades de la vida las he conocido, digo las, aunque entre ellas había un hombre, y, ¡mira tío!, mayoría manda -gramaticalmente hablando-.
Como decía me he visto gratamente sorprendido, porque, cuando ya se despedían unas de otras y de otro comentaban entre si, que "tenían que reunirse para leer literatura sobre Hypatia de Alejandría".
Este tipo de clubes (¿?) es como los billetes de 500 euros, se sabe que existen, pero casi nadie ha visto ninguno, y lo mismo me pasa a mi: por fin he conocido interesantes personas normales (y recalco lo de normales), que no se juntan en torno a una secta, partido, sindicato o agrupación de jefes.
Se reúnen por algo tan intangible y magistral como es la literatura.
Chicas, chico, ha sido un enorme placer haberos conocido, y más placentero -al menos para mi-, será que sigamos manteniendo contacto.
Un fuerte abrazo.
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