1/23/2010

CURSILLO PARA EL PERSONAL DEL MANICOMIO: NAUSEABUNDO



Autor: Tomas Opapo. Ostiador psiquiátrico

En esta noches pasadas que me ha tocado trabajar, mis compañeras me comentaban que se iban a apuntar a un cursillo de defensa personal que se iba a impartir en el manicomio.

Así a botepronto, me pareció una pasada fuera de lugar, de contexto, típica de personas que no tienen ni puñetera idea de lo que es trabajar en un manicomio con enfermos mentales.

Luego, me lo pense mejor, analicé la cuestión con más tranquiliad, y las conclusiones fueron mucho peores.

En primer lugar me acordé de un Doctor, que cada vez que denunciábamos algo sobre agresiones al personal en el manicomio, enseguida salía a la opinión pública diciendo que ese tipo de noticias estigmatizaban a los pacientes mentales.

En este caso, hasta ahora no le oído decir ni esta boca es mía, porque parece que va a ser un superjefe y por lo visto las cosas se ven con otra perspectiva.

Me parece NAUSEABUNDO que en vez de emplear dinero y esfuerzos en enseñar psiquiatría al personal, enseñar maneras de trato a los pacientes, enseñarles a comportarse como profesionales y no como si el manicomio fuese un patio de vecindad, se dediquen a enseñar a defenderse físicamente del loco.

Ya están dando paso para crear los 007 de la psiquatría, con licencia para ostiar, dejando atrás la palabra, la comunicación y el adiestramiento terapeútico.

De eso nada, ¡Cómo me levantes la voz: dos sopapos!

Pero lo que más me asombra, -aunque no se por qué- es que parte del personal ha acogido con alegría este tipo de curso, ya que al no tener ni puñetera idea de donde están trabajando consideran un derecho defenderse de los locos.

Sin embargo, lo que yo quiero es que me den cursillos que me enseñen a calmarme de las ganas que me entran de repartir ostias, cuando voy al departamento de personal y me tratan como si fuese la última mierda, con toda la mala educación y falta de conocimientos que les caracterizan (a casi todos)

Me gustaría que la representación sindical fuese más valiente y menos compemporizadora con las jefaturas, porque ya se están olvidadando que las Jefaturas no tienen amigos, sólo intereses.

Antes de terminar esta entrada de blog, quiero aclarar, que llevo 33 años trabajando en el manicomio y que en todo ese tiempo los pacientes tan sólo me han dado dos bofetadas, y además por mi culpa, lo reconozco, eran más joven y más ignorante.

Y todos los que me conocen saben que si hay broncas estoy en primera fila, y si hay peligro soy el primero en dar la cara, y aún así nunca me han tocado.

Son más peligrosos los jefes con su manera de organizar -si se puede llamar así- y hacer las cosas que hacen, que los pacientes.

Este curso me parece una manera de dejar entrar al nazismo en los hospitales, dentro de poco, ya veo al culto y experto personal -de esos a los que gustan más los programas del corazón, en el trabajo, que aprender cosas de su profesión- usando kimono, en vez de uniforme.

Y luego hay gente que presenta denucias porque les llaman Mengele. ¡Si es que están tontos!

Lo dicho NAUSEABUNDO, por lo que me tomaré la libertad, como trabajador público que soy, de informar a la ciudadanía y clase política de este tipo de prácticas, vía prensa y entrevistas.

Lo primero que hay que enseñar es la diferencia entre trastornos de la conducta, trastornos de la personalidad y esos nueva enfermedad mental llamada rentismo, y cuando aprendan eso, seguiremos enseñando otras cosas, como que el manicomio no es la franja de Gaza, ni son buques pesqueros que esquilman la pesca a los somalies.

Son nuestros enfermos, de nuestra tierra.

2 comentarios:

  1. te has olvidado de que tampoco es nIngun gediatrico, ni mucho menos una ONG, que ultimamente es lo que parece

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  2. Cuando no hay orden ni concierto, cualquier cosa vale. Zamudio es un hospital donde no hay ninguna organización. No hay organización en el departamento de personal, donde apenas saben hacer nada, si tienes que hacen un trámite, lo normal es que tengas que acudir un montón de veces tragandote continuamente la mala leche de toparte con tanta ineptitud, a veces llegas a dejarlo por imposible porque francamente acabas estresado.
    Si acudes al jefe de recursos humanos,con esa facilidad de palabra que le caracteriza, sales más estresado aún.
    Si vas donde las supervisoras, si es que encuentras alguna porque no se sabe donde están, ni que hacen si es que hacen algo.
    que nivelazooooooooooooooooooooooooooooo
    Y te extrañas del curso de defensa personal, con todo lo que nos da para hablar, asi estamos entretenidos, psiquiatría ¿que es eso?.
    Luego hablaba el jefe de los jefes de la estigmatización del paciente psiquiátrico, un paciente al que ya dentro del hospital le dejamos sin voz, ni voto. Totalmente sometido al sistema que le imponemos, medicación, medicación y más medicación. Sin ningún tipo de diferencia por patologias, sin terapias específicas etc..etc..

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