PORQUE SI. PORQUE PUEDO.

Autor: El Pérez de turno. Lahostiaquebienselopasanacuentadeltonto.

No hace mucho, en uno de esos eventos a los que asisto y/o me suelen invitar, tuve ocasión de contarle mis últimas cuitas laborales, a una serie de personas de esas que toman decisiones políticas, que imponen sentencias, y que tienen la investigación como vida laboral.

Al señor que se dedica a la política, un parlamentario vasco, iba cambiando de cuanto más les iba contando, si empezó con los ojos semicerrados, cuando termines mi aventura parecía un búho, con los ojos como platos.

- Si no fuese porque te conozco no me lo creería.

El otro individuo que estaba en el grupo, uno de esos jefes de investigación policial que tienen en el Gobierno, y que ya debía de estar de vuelta de todo, me dijo que eso pasa bastante en la Administración Pública y la culpa la tienen los funcionarios por no denunciar.

Le comenté que precisamente yo era uno de los que denunciaba y me aclaró:

Quería decir, por no denunciar a la policía.

Su Señoría, muy en su sitio, comentó que los tribunales tienen que lidiar más con trabajadores denunciados, que con trabajadores denunciadores, que es una pena, pero que el Estado de Derecho, no es perfecto, y lo que es peor, cuando los denunciados son políticos o altos cargos se levantan un montón de piernas para zancadillear, pero cuando quieren fundir (sic) a un trabajador, todo son facilidades, incluso de sus compañeros.

Pasamos a otras conversaciones, hablamos del futuro -supongo que el lejano-, del próximo Congreso Internacional que se celebrará en Japón, de lo buenos que estaban los pintxos, y el cafe, que no era gran cosa.

En fin, como en todos los eventos, todo el mundo habla bien de todo el mundo -al parecer, menos yo- y se tira faroles sobre su trabajo, etc. vamos, lo normal.

Cuando ya estábamos todos despidiéndonos, besitos por aquí, estrechar manos por allá, que si nos vemos en la próxima y todo eso...

Cuando el Investigador se despidió de mi, me pasó su tarjeta personal, y me pidió que le llamase a primeros de Julio, para hablar del tema. Anonadado, le di las gracias, porque pensé que mi historia se la pelaba.

El político, me dio un abrazo mientras me decía: llámame al Parlamento para quedar, y tráeme documentación. ¡¡¡¡...!!!!

El Jurídico, cuando nos estrechábamos las manos se descojonaba de la risa y me comentó, que con una buena investigación policial, lo tenía fácil, que intentarían joderme, pero que al final un
Gobierno pequeño, como el Vasco no podía permitirse escándalos, y menos en estos momentos.

El Magistrado, especialista en el Contencioso de otra Autonomía, me animó a no dejar de luchar, y a tener paciencia, que el tiempo siempre juega a favor del poderoso y que ya nos veríamos en la próxima.

Resumiendo, buenas palabras, buenos consejos y sobre todo buenos teléfonos y direcciones para llamar.

Ya estoy preparando la documentación.